Se usa para vacilar a alguien que es bien despistado, medio lenteja o que no capta una aunque se la dibujes. Es como decir que es más inocente que una paloma y más verde que una lechuga. Suena cariñoso, pero igual pica un poquito si te lo sueltan seguido, así que se usa más entre patas con confianza.
"Javi se fue en motokar al centro sin plata ni celular, regresó todo preocupado preguntando la hora a todo el mundo. ¡Qué zanahorio ese muchacho, parece que vive en la luna de Iquitos!"