En la zona de Los Lagos se usa para hablar de alguien que anda encendido con el coqueteo, que llega a un carrete y de una ya está tirando onda a medio mundo. No es el hot dog del carrito, es la persona que anda con la autoestima por las nubes y con la mirada más caliente que sopaipilla recién frita.
"Oye, llegó el Diego al carrete y el perrito caliente ya anda puro lanzando miradas, todavía no se sirve la primera chela y ya tiene medio grupo pegado a él."