Se usa para decir que alguien se queja o llora con un escándalo brutal, como un cochino cuando lo llevan al matadero y ya sabe que se jodió todo. Es una expresión bien gráfica, medio cruel si te pones sensible, pero muy sabrosa para describir a la gente dramática que arma show por cualquier cosa.
"Vale, deja la lloradera como cochino en matadero porque se acabó la cerveza, que mañana bajamos pa' Maturín y compramos dos cajas más."