Interjección suave para expresar sorpresa, enfado light o asombro cuando pasa algo que te deja medio loco pero sin llegar al insulto gordo. Es como un caramba o un joer descafeinado, muy útil cuando no quieres soltar tacos delante de tu abuela, de un profe o de alguien con el que quieres quedar bien.
"Jolines, tío, salí a por pan un momento y acabé en la playa con ustedes echando unas birras y sin ganas de volver a casa"