Expresión muy de barrio para decir que toca recoger y poner todo en orden después de armar el desmadre. Se usa mucho tras fiestas, reuniones ruidosas o cuando dejaste la casa hecha un caos. Es como asumir la cruda moral del tiradero. Y la neta, nadie quiere, pero alguien tiene que hacer los recogeres.
"Ya estuvo, plebes, se acabó el perreo, ahora sí a hacer los recogeres porque si mi jefa ve este tiradero nos corre a todos de la casa."