Se usa para decir que algo es muy fácil, tan sencillo que casi ni hace falta pensarlo. Es como cuando te ponen una tarea que parece de preescolar y tú ya estás en otro nivel. Suena cariñoso y confiado, típico tono venezolano relajado. Y hay que admitir que cuando algo sale fácilito, sabe el doble de sabroso.
"Pana, ese parcial estaba fácilito, si copiabas al burro del salón igual pasabas sin despeinarte, chamo."