Se usa en Panamá para decir que alguien está encima de uno todo el rato, intenso, fastidioso o pegado sin descanso, igualito que el sol del mediodía que no perdona. Puede ser porque está molestando, exigiendo cosas o jodiendo la paciencia. Es de esas frases que duelen solo de imaginar el calorazo, pero tiene su gracia.
"Man, desde que llegué a la oficina estás pega'o como el sol, preguntando lo mismo cada cinco minutos, deja la jodienda que me vas a derretir la cabeza."