Se usa para decir que alguien está actuando de forma súper imprudente, sin medir consecuencias y con una locura medio suicida. No es solo estar despistado, es tener la cabeza en otro planeta y hacer vainas que cualquiera diría que son una locura total. Y hay que admitir que suena tan sabroso como peligroso.
"Ese pana está muy loco de bola, se lanzó en moto por la autopista sin casco y grabando un live como si nada."
Cuando alguien tiene ideas tan remontadas que su mente parece una telenovela surrealista en 7D.
"Mira nada más a Lupita, está tan loca de bola que jura que puede hablar con el cactus del vecino y discutir temas filosóficos."
Cuando alguien se pone a hacer mil actividades distintas con un entusiasmo desenfrenado y termina olvidando la mitad de ellas.
"Juan está tan loco de bola que comenzó a hacer tres cursos online, yoga, compostaje en casa y clase de ukelele al mismo tiempo... ya se le olvidó reservar el viaje que decía planear."
Ser tan excéntrico que alteras el clima emocional del lugar a tu alrededor como si fueras un fenómeno meteorológico raro.
"Tío, Claudia está tan loca de bola que en vez de lluvia, ahora en su casa cae confeti cada vez que organiza cenas."
Cuando alguien, en un estado de embriaguez absoluto, empieza a narrar historias delirantes de épocas pasadas que todo el mundo sabe que son pura ciencia ficción.
"Esa noche Manolo estaba tan loco de bola que juró haber fundado una isla solo con bici y cinta adhesiva."
Cuando alguien se obsesiona excesivamente con algo mundano o innecesario.
"Pepe está muy loco de bola, lleva una hora eligiendo entre cincuenta tonos de azul para las cortinas del baño."
Estar energéticamente hiperactivo, como si hubieras tomado diez cafés seguidos y no pararás de moverte o hablar.
"Después de dos doble shots de café, Joaquín estaba tan loco de bola que organizó todo el garaje en menos de una hora mientras montaba una coreografía improvisada."
Cuando un individuo reinventa las reglas de un simple juego y lo transforma en una obra maestra de la inteligencia absurda combinada con estrategias inexplicables.
"Aitor está tan loco de bola que convirtió una partida de parchís en un campeonato intergaláctico donde los dados deciden el destino del universo en vez de avanzar casillas."
Participar en una actividad de riesgo completamente extremo solo por un capricho momentáneo, como si te crecieran alas invisibles cada vez que tomas una decisión.
"Miguelito está tan loco de bola que decidió colgarse de la gaviota del parque para comprobar si realmente volaban más rápido cuando soplaba el levante."
Cuando alguien cree que inusuales invenciones caseras tienen sentido y luego resulta extraño pero funcional, como transformar una aspiradora en un karaoke portátil.
"Pedro está tan loco de bola que convirtió su coche siniestro total en un jacuzzi ambulante con ducha a presión, ¡y hasta herramientas multiusos!"