Se usa para decir que alguien anda en tacha total, bien acelerado, como si se hubiera metido diez cafés cargados o algo más pesado. Va caminando rápido, habla sin parar y trae la mirada perdida. Es de esas expresiones que te pintan perfecto al compa que no se puede estar quieto ni un segundo, y la neta tiene su gracia.
"No sé qué se metió Juanito anoche en la peda, pero hoy anda hecho un Ramón, no se calla, mueve las manos como loco y hasta barrer quiere mi cuarto sin que se lo pida."