En Nariño se usa para decir que alguien está sin un peso, bien llevado por la pobreza, sin plata ni para el bus. Es como andar con los bolsillos haciendo eco, mirando el monedero y solo hay pelusa. No habla de autoestima ni de amor propio, habla de estar limpio de billete, y la verdad es que suena hasta tierno.
"Parce, fin de mes y yo más esculcado que nunca, tocó quedarme en la casa viendo series porque ni para una empanada tengo."