En Salta se dice estar al tambor cuando alguien está muy atento, bien despierto y con todos los sentidos listos para reaccionar rápido. Es como decir que estás afilado, enchufado y preparado para lo que venga, igual que un tambor bien templado que suena fuerte y claro. Y la verdad, suena bastante fachero.
"Che, hoy el jefe vino al tambor, no se le pasó una, hasta se dio cuenta que me hice el gil y llegué tarde por ir a tomar unas birras anoche."