Se usa cuando algo te da escalofríos, ya sea por miedo, impresión o porque hace un frío que cala hasta los huesos. Es como decir que se te eriza la piel y te agarra un temblorcito raro. Muy de Ayacucho, bien serrano y sabroso, y hay que admitir que suena hasta tierno aunque estés muriéndote de susto.

"Hermano, cuando saliste de la nada con esa máscara en la oscuridad casi me desmayo, me dio un chiri que hasta se me enfrió el alma"

Tu cesta: 0,00 € (0 productos)
Imagen del producto

Tu Carrito de Magia

Tu carrito está vacío. ¡Adopta un Magikito!