Es cuando todos juntan lana entre cuates para comprar algo que se va a disfrutar en bola, como chelas, comida o hasta un regalo. Cada quien pone lo que puede y con eso se arma la fiesta. Es muy de barrio, muy de confianza y la neta casi siempre acaba en buen chisme y risas.
"Ya cayó la quincena, raza, vamos a hacer coperacha para las tortas y los chescos, porque el Iván siempre llega con un hambre que ni los tamales del Oxxo le llenan."