Dícese de quien ha bebido tanto que ya ni ve, o sea, está bien borracho al punto de que le cierran la cantina y sigue queriendo más.

"Ayer el Luis terminó ciego de trancazo, andaba abrazando faroles como si fueran sus panas."

Tu cesta: 0,00 € (0 productos)
Imagen del producto

Tu Carrito de Magia

Tu carrito está vacío. ¡Adopta un Magikito!