Expresión muy marcada por los años sesenta en España, típica de canciones y pelis antiguas, para hablar de una chica moderna, coqueta y fiestera con rollo retro. Suele ir con minifalda imaginaria, flequillo perfecto y ganas de bailar todo el rato. Hoy se usa con cariño y un punto nostálgico, como guiño a otra época.
"En las fiestas del pueblo, Laura se plantó su vestido de lunares, el flequillo cardado y no salió de la pista en toda la noche, todos diciendo que era la chica ye-yé oficial de la verbena"