Se usa para hablar de alguien que vive pendiente del chisme, que se entera de todo antes que nadie y lo reparte por el barrio con una alegría sospechosa. Es la típica persona que si pasa algo a la mañana, a la tarde ya lo tiene versionado en tres temporadas. Y hay que admitir que a veces entretiene.
"No le cuentes nada a la Nélida, che, que es más charata que la radio del colectivo y en dos mates ya sabe todo el barrio que cortaste con tu novio."