Se usa cuando a alguien le toca pagar la peda, invitar las chelas o ponerse guapo con el grupo, casi siempre porque tuvo un golpe de suerte o le fue chido en algo. Es como decir que hoy le toca aflojar la cartera y no hacerse pato. Y la neta, cuando cae la rama bien, todos felices.
"Con el bono que me cayó en la chamba ya me cayó la rama, así que vámonos al barecito del centro y yo pago las primeras rondas de chelas."