Se usa para decir que alguien anda agrandado, re confiado y con el ego por las nubes, porque siente que todo el mundo lo busca y lo quiere cerca. Es como ser el pan calentito en una fiesta de pueblo, que no dura ni dos minutos en la mesa. Y la verdad, a veces da un poco de risa verlo tan creído.
"Desde que lo ascendieron en el laburo, el tipo anda como pan en festejo, entra a la oficina saludando a todos como si fuera el intendente del pueblo."