Expresión usada para referirse a alguien que está siempre despistado o que vive en la luna, como si su cabeza estuviera 30 kilómetros lejos de donde debería.

"¡Oye Juan! ¿Te acordaste de comprar el pan? Ay, parece que andas a la treinta."

Tu cesta: 0,00 € (0 productos)
Imagen del producto

Tu Carrito de Magia

Tu carrito está vacío. ¡Adopta un Magikito!