Se usa cuando quieres abrazar a alguien con tanto cariño que casi lo dejas sin aire, como si lo estuvieras apretando para exprimirle todo el amor. Es ese abrazo intenso, medio ñoño pero sabroso, que das cuando extrañas un chorro a la persona. Y la neta, a veces hace más falta que una siesta después de la comida.
"No manches, cuando vi a mi abuela en el aeropuerto después de años, me dieron ganas de achucharla tan fuerte que casi le tiro los lentes y el rebozo del apretón."