Expresión chilena que se usa cuando alguien se va a tirar a la cama o al sillón a flojear sin culpa, como chancho regaloneando al sol. Es básicamente rendirse al ocio máximo, cero productividad y mucha comodidad. Suena tierna, pero también deja claro que uno se va a poner más flojo que bandera de fiesta, y la verdad es que igual dan ganas.
"Hermano, después de esta semana en la pega estoy hecho bolsa, hoy día llego a la casa, tiro el chancho al prado y no me mueve ni un terremoto"