Se dice de alguien que es súper reservado y no suelta prenda: le cuentas algo y se lo guarda como si tuviera candado. También vale para el que acumula chismes, secretos o historias y no las anda ventilando por ahí. Vamos, un baúl humano, de los que no se abren ni con palanca.
"Cuéntaselo al Juanito nomás, si ese es como un baúl: le tirai el cahuín y no lo suelta ni aunque lo inviten a completos."