Saludo muy informal, típico de la calle, que se usa para decir qué tal, qué pasa o cómo va todo. Es como un combo entre qué hubo y qué onda, perfecto para arrancar conversación sin tanta ceremonia. Suena cercano, relajado y un poco canchero, ideal para colegas, familia o cualquier persona con la que tengas confianza.
"Quiubo, parcero, ¿todo bien o qué? Contame pues cómo te fue anoche en la rumba, que me dijeron que saliste más prendido que semáforo en hora pico."