Se usa para vacilar a la persona que es tan torpe que todo lo que agarra termina roto, chueco o hecho un ocho. Es como una especie de antitalento manual, pero con cariño y risas, no con mala leche. Suena a superhéroe, pero en versión desastre total, y por eso mismo hace tanta gracia cuando se suelta.
"Parce, inviten a otro a ayudar a decorar, que ese man es puro puño de oro, ya botó dos vasos y casi tumba la torta del cumpleaños."