Expresión muy usada para decir que alguien se puso agrandado, medio sobrado, como si de repente fuera la última Coca-Cola del desierto. Es cuando la persona se cree más que el resto, se pone altanera y mira en menos a los demás. Básicamente, se le subieron los humos y anda con la pluma parada todo el rato.
"Desde que salió en la tele hablando dos minutos, se le paró la pluma brígido y ahora llega a la pega saludando como si fuera estrella de Hollywood."