En Junín se usa para señalar a alguien medio rarito, con actitudes o mañas que se salen de lo normal, como un loquito buena onda de la sierra. No siempre es insulto, a veces es más burla cariñosa entre patas. Es como decir que la persona es bien peculiar, pero con ese sabor serrano que le da más gracia.
"Oye, ese pata ha venido con poncho, sandalias y sombrero de chalan a la fiesta de promo, está bien jameque de verdad."