En Antofagasta se usa para hablar de alguien que se manda a cambiar sin dejar rastro, sobre todo cuando hay que apechugar con la cuenta o con algún compromiso fome. Es el típico personaje que se esfuma como fantasma y deja a todos pagando. Y hay que decirlo, es bien barsa pero igual da risa.
"El Nico dijo que iba al baño, se llevó la chaqueta y desapareció del mapa. Siempre hace un pebre cuando ve que llega la cuenta del carrete."