Expresión muy maña para decir que alguien tiene una sed brutal, que está reseco perdido, como si llevara horas dando vueltas por los Monegros sin una triste fuente. Se usa tanto para el calor como para la resaca, y la imagen del bacalao ya deja claro que ahí no hay ni gota. Y oye, la comparación tiene su gracia.
"Tú tira pa'l bar, que después de currar en la obra con este cierzo estoy más seco que un bacalao en los Monegros, me bebo hasta el agua de los floreros."