Se usa para decir que alguien anda bien ácido, de malas, buscando pleito o metiéndose donde no lo llaman. Es como cuando una persona anda tirando mala vibra, arruinando el ambiente y echando a perder todo con sus comentarios. No siempre es maldad pura, a veces solo andan sensibles, pero igual caen gordos.
"Ya ni le digas nada a la Lupita, hoy anda de limón, se peleó con la suegra y anda aventando veneno hasta al del gas."