En Anzoátegui se le dice rumache a esa maleza terca que sale donde le da la gana menos donde hace falta. Es el monte que invade el patio, la acera y hasta las macetas bonitas. Lo reconoces porque tu abuela siempre te manda a arrancarlo y parece que mientras más quitas, más aparece. Es como un jefe final del jardín.
"Chamo, ayer me pelé las manos arrancando rumache en el patio y hoy amaneció el doble, ese monte está burlado de mí."