Imagen de Ratoncito Explorador

El más curioso del bosque

Cuando la rutina se vuelve demasiado predecible y sientes que necesitas un empujón para salir de tu zona de confort, aparece el Ratoncito Explorador. Este pequeño Animagikito llega para recordarte que el mundo está lleno de rincones por descubrir.

Es de esos que no puede quedarse quieto. Siempre con las orejas atentas y los bigotes temblando de emoción, el Ratoncito Explorador vive para la aventura. Le encantan los mapas (incluso los que nadie entiende), las rutas sin planificar y esos momentos en los que te pierdes y acabas encontrando algo mejor.

Se cuela por los sitios más improbables: detrás de libros olvidados, dentro de cajas que llevan años sin abrir, o en ese cajón de cosas raras que todos tenemos. Desde ahí susurra ideas locas, anima a los tímidos y planta semillas de curiosidad. ¿Ese viaje que llevas meses posponiendo? ¿Esa conversación que te da un poco de vértigo? El Ratoncito Explorador te da el empujoncito.

No busca grandes hazañas ni expediciones épicas. Su magia está en las aventuras cotidianas: probar ese restaurante nuevo, cambiar de ruta al trabajo, hablar con un desconocido, atreverte a decir que sí cuando normalmente dirías que no. Porque para él, explorar no es solo viajar. Es vivir con los ojos bien abiertos.

Ideal para los inquietos de espíritu, para quienes necesitan romper la monotonía, o para cualquiera que entienda que la vida está hecha para ser explorada, no para ser observada desde la ventana.

Cuidados

Los Magikitos son bastantes resistentes, pero les gusta que los traten con cariño:

  • Nada de agua - Límpialos con un trapito seco si se les posa el polvo
  • Evita el sol directo - Demasiado sol puede decolorarlos
  • Sitio seguro - Ponlos donde no se vayan a caer

Ver guía completa de cuidados

¿Te ha gustado este Magikito?

Puedes conocer a otros de sus amigos o, si te sientes con ganas de aventuras... ¿por qué no adoptas uno?

Tu cesta: 0,00 € (0 productos)
Imagen del producto

Tu Carrito de Magia

Tu carrito está vacío. ¡Adopta un Magikito!